SEÑALES DE QUE HAS ENCONTRADO AL CANDIDATO PERFECTO

Señales de que has encontrado al candidato perfecto

Algunos indicios muestran que un candidato no es idóneo.

La mayoría de los reclutadores de personal son conscientes de las señales de alerta que deben tener en cuenta en los candidatos: llegar tarde, hablar mal de un antiguo jefe o trabajo, respuestas poco concretas, etc.

Desde Workima te daremos unas señales de que has encontrado al candidato perfecto.

Está claro que estar pendiente de estas señales (o la falta de ellas) puede darte una mejor idea al principio de si un candidato debe pasar a la siguiente ronda o retirarse de la competición, ayudándote a hacer tu trabajo de manera más eficiente y segura.

Si te estás preguntando si un candidato que tienes en proyecto es el perfecto, desde Workima queremos darte unos signos en los que te puedes fijar para saberlo definitivamente:

1. Están informados:

Que los candidatos se hayan informado y hayan investigado a la empresa y el puesto por adelantado, es una buena señal. Llegan con las expectativas correctas. Esto nos lleva a pensar que si un candidato demuestra que se han tomado su tiempo para sumergirse realmente en la organización, tal vez sea el correcto para el puesto.

El candidato perfecto aparece en la entrevista armado con muchos conocimientos sobre la empresa, pero también está ansioso por aprender más sobre los productos que ofrecéis y los clientes que tenéis.

2. Están entusiasmados:

No se trata sólo de lo que dice un candidato, sino de cómo lo dice. El candidato adecuado debería estar tan interesado en la empresa como la empresa en él, y si puede ver el entusiasmo en su lenguaje corporal y la emoción en su voz, es una gran señal.

Escuchar a los candidatos sentirse orgullosos de su trabajo anterior, y del trabajo que podrían hacer en este nuevo rol es muy bueno. Este tipo de entusiasmo muestra que están realmente interesados en el campo.

3. Son auténticos:

Los reclutadores a menudo hablan sobre el candidato “perfecto”, pero la verdad es que cada candidato tendrá algunos defectos. Tienes que ser tolerante en este sentido y aceptarlo. Todos tenemos nuestras cosillas.

El candidato “ideal” estará abierto a sus propias debilidades. Por ejemplo, un aspirante para un puesto tecnológico debería admitir que las presentaciones en persona se le dan mal (si ese fuera el caso). Si un candidato admite este tipo de cosas significa que es autoconsciente, por lo que también será capaz de superarlo en un futuro si fuera necesario.

De manera similar, también está bien que en lugar de pintar una imagen optimista de la historia laboral previa, alguien de repente cuente algún error que cometió en el trabajo y cómo eso le hizo aprender y ser un mejor profesional.

Hay que reconocer que nadie es perfecto, sin embargo, el aspirante perfecto será una persona que tenga ganas de aprender y crecer; no alguien que trata de convencer de que nunca se ha equivocado.

Tener empleados con agilidad para el aprendizaje es fundamental si desea que las personas puedan aprender y crecer con la empresa.

4. Son elocuentes:

Los mejores candidatos responden rápida y concisamente a lo largo del proceso. Esto hace que la entrevista fluya perfectamente y habrá un vaivén natural entre entrevistador y entrevistado.

Es una señal de que el aspirante se siente como en una conversación normal y no como en un interrogatorio. Este tipo de candidato tendrá preguntas razonables sobre su futuro puesto de trabajo preparadas.

5. Traen ideas:

Es excelente cuando un candidato tiene un historial de éxitos, pero también deben ser progresistas y mostrar lo que podrían aportar específicamente al puesto.

Ya conoces las señales de que has encontrado al candidato perfecto. ¡Ponlo en práctica!

Carrito de compra
Scroll al inicio