HAZTE IMPRESCINDIBLE EN EL TRABAJO

Hazte imprescindible en el trabajo

La mejor manera no sólo de mantener un trabajo, si no de crecer en él, es hacerte imprescindible.

Dicen que nadie lo es, ¿tú que crees?

Cuando uno es capaz de tocar la tecla necesaria y ser lo suficientemente resolutivo, puede convertirse en un trabajador del que es imposible desprenderse. Si a eso le vas añadiendo poquito a poquito confianza para que te vayan dando más responsabilidad y paso; estarás en el camino correcto. Los jefes no son tontos y notan estas cosas, por lo que si pones empeño lograrás impresionar y quizá ganarte un puesto sólido.

Pero debes tener cuidado, es muy diferente ser un chico de los recados que ser un jugador clave dentro del equipo. Sin duda, si logras ser uno de los segundos; te asignarán labores importantes.

Desde Workima, queremos darte cuatro consejos para que puedas llegar a ser un trabajador imprescindible dentro de tu compañía; si es que todavía no lo eres. ¡Hazte imprescindible en el trabajo!

1. Crece a partir de las críticas constructivas que te hacen:

Cuando un jefe dice algo o da instrucciones, lo normal es pensar que es sin mala intención y que tienen un fundamento. Por lo que si eres un buen trabajador debererías ser autoexigente y tenerlo en cuenta. Sin embargo, la diferencia entre un buen trabajador y un trabajador sobresaliente, es que un trabajador sobresaliente no sólo seguirá las instrucciones que se le dan si no que también sabrá llevar las instrucciones a otro nivel y darles fuerza y personalidad. Los jefes normalmente están ocupados encargándose de muchas cosas, por lo que si te adelantas y facilitas su trabajo serás muy bien valorado.

Cuando demuestres lo competente que eres, poco a poco delegarán más en ti y te volverás más indispensable.

2. Ten una actitud de “yo puedo”:

La actitud es muy importante, y puede ser lo que te diferencie del resto de tus compañeros. Sé una persona que no dice que no, todoterreno y capaz de hacerlo y resolverlo todo. Los jefes no sólo buscan “máquinas de trabajo”, si no gente que tenga una actitud positiva y que con esta actitud sean capaz de arrastrar a los demás.

Cuanta más confianza tengan todos en ti, jefes y compañeros; más fuerte será tu relación con todos y te tendrán más en cuenta para funciones de más responsabilidad.

Si delegan en ti algo que ves muy complicado, no digas que no puedes de primeras. Lo que debes hacer es meditarlo y, si no lo ves viable, da una solución y no hagas de ello un problema. Esto es una cosa que no todos pueden hacer y es muy valorado entre los jefes.

3. Quítale carga a tu jefe:

Siempre ve un paso por delante. Ofrécete para quitarle carga, interésate por los proyectos venideros. Si hay reuniones, clientes o cualquier cosa que te produzca interés; hazlo saber. No tengas miedo. Pon tus habilidades a la disposición de tu empresa, que sepan que eres capaz y que vales.

Para volverte realmente imprescindible haz saber cuáles son las virtudes que tienes y que se pueden complementar con la carencias de tu jefe.Si tu jefe no puede, no le gusta o no se le da bien hacer algo; ofrécete para hacerlo tú. De esta forma siempre querrá tenerte cerca.

4. Mentén informado a tu jefe de cualquier bache:

A los jefes les gusta estar al tanto de todo, por lo que es bueno que los informes de cómo están yendo las cosas.

Recuerda: ¡Hazte imprescindible en el trabajo!

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