A todos nos han hecho alguna vez la temida pregunta “¿cuál es tu mayor debilidad?” o “¿cuál es tu mayor defecto?”
Siempre aparece una pregunta de este tipo y, ¿quién quiere hablar honestamente sobre las debilidades de uno mismo cuando tiene la intención de impresionar en una entrevista de trabajo? La respuesta es NADIE, pero esta es una pregunta poderosa que no tienes que responder con respuestas ingeniosas sobre tu perfeccionismo o tu naturaleza adicta al trabajo. Dar forma a tu respuesta te da una gran oportunidad para exhibir tu autoconciencia y promocionar tu crecimiento profesional.
Esta es una pregunta muy común en las entrevistas. Lo bueno es que sabes que te lo van a preguntar, por lo que es imprescindible que tengas una respuesta clara y concisa. ¿Sábes cuál es tu mayor debilidad?
Desde Workima queremos darte unos consejos a seguir para que este pequeño bache en el camino no sea un inconveniente y puedas sacar provecho de él.
1. Desmitifica la situación de la entrevista:
Las entrevistas son conversaciones entre partes iguales. El entrevistador es una persona como tú y su función es ver si encajas en la empresa; pero tú también debes descubrir durante la entrevista si te interesa verdaderamente el puesto. Lo mejor para ambos es que la conversación sea abierta, honesta y sincera. Enfoca esta pregunta con ese espíritu. Tú tienes poder en esta conversación, y tu opinión acerca de la organización, el personal y el liderazgo que observas en el lado de la contratación es tan importante como la forma en que te perciben. Es una evaluación de dos vías.
2. Reflexiona honestamente sobre dónde luchas profesionalmente:
No te hagas el loco con esta pregunta; abraza esta oportunidad. Piensa en tus anteriores trabajos, en qué cosas crees que habrías podido mejorar, ten en cuenta los consejos de tus anteriores jefes o compañeros; hazte un examen a ti mismo. Sé honesto contigo mismo acerca de tus áreas profesionales de desafío. La autoconciencia es una habilidad muy fuerte y demandada por los jefes en las empresas.
3. Considera cómo has abordado los problemas:
Hacerlo demuestra madurez y sentido común. Además te ayudará a mejorar en posteriores puestos de trabajo y también en esta entrevista. Sé sincero sobre tu experiencia laboral y cómo esperas mejorar en esta nueva etapa.
4. Ánclate en tus puntos fuertes:
Nuestras fortalezas nos ayudan a navegar por nuestras debilidades, por lo que es una buena estrategia incluir una en tu respuesta . Aquí hay un ejemplo: “Tiendo a ser un poco desorganizado. Mi rol siempre ha sido creativo, y aunque he ido a clases para aprender mejores habilidades de organización, esto no es algo natural para mí. Sin embargo, tengo un sólido sentido de las prioridades y una fuerte ética de trabajo. Así que seguiré trabajando en estos aspectos”.
5. Escribe tu respuesta y ensaya:
Debido a que esta pregunta es un poco compleja, escribe tu respuesta . Esto te ayudará a pensarlo mejor. Luego practica con alguien en cuya opinión profesional confíes.
Cuando estás en la sala de entrevistas, a veces el nerviosismo puede que te haga perder un poco el control. La forma de manejar esto es entrenando tu mente y cuerpo. Reforzarás tu confianza cuando te des cuenta de que puedes abordar cualquier pregunta de la entrevista a pesar de la presión que puedas sentir.
¡Y que no se te olvide hacer una investigación de la empresa y que sea parte de tu preparación! Es una buena forma de que te mantengas fresco, con la situación controlada y listo para dar una buena impresión!
¿Ya conoces cuál es tu mayor debilidad?
